ángeles en la nieve



El estómago se me revuelve, y vuelvo a plantearme si Valtteri sabía lo trastornado que estaba Heikki. Su padre quedará destrozado cuando le diga lo que pensaba Heikki, lo que hizo. Se culpará a sí mismo, quizás incluso culpe a Dios. Tal vez ya lo haga. Una parte de mí quiere borrar la carpeta, dejar el caso sin resolver. Me pregunto si valdrá de algo dejar la verdad al descubierto, si servirá para hacerle justicia a Sufia. La respuesta es que sí, y eso me pone enfermo. Abro el último archivo, que se llama ?BABILONIA?:


Y en su frente un nombre escrito: ?Misterio, Babilonia la Grande, la madre de las fornicaciones y de las abominaciones de la Tierra?. Revelación 17:5

Si la hija de un sacerdote se envilece a sí misma prostituyéndose, envilece a su propio padre, y por eso será quemada. Levítico 21:9

La gente de esa ciudad la matará a pedradas, por haber cometido una acción infame en Israel, al prostituirse en la casa de su padre. Así harás desaparecer el mal de entre vosotros. Deuteronomio 22:21

Jumala vihaa huoria. Dios odia a las zorras. Las zorras deben morir.



Las palabras me impresionan. Las preguntas se me amontonan en la mente. ?De dónde ha sacado estas ideas? Expresaba amor en su poema. ?A quién iba destinado? Expresaba odio. ?Por qué, aparte del color de la piel, lo dirigía contra Sufia? ?Cómo podía haber sabido él de su promiscuidad? Por las citas del archivo Babilonia, parece ser que habría escogido la quema o la lapidación como método de ejecución de Sufia. ?Por qué la asesinaría del modo en que lo hizo? Sigo mirando en el ordenador, en busca de respuestas.

Encuentro una carpeta de archivos descargados de una página web sobre crímenes históricos que se llama ?La Dalia Negra: la historia real sobre el asesinato de Elizabeth Short?. No sé mucho sobre el caso, aparte de lo mencionado por Jaakko, así que me lo leo. Es un tratado completo, ofrece teorías sobre el asesinato y habla del crimen con todo detalle.

Conecto mi ordenador y visito la página web. Es enorme, con artículos sobre decenas de asesinos en serie y criminales célebres, pero yo me centro exclusivamente en el caso de la Dalia Negra. El asesinato de Sufia parece ser un torpe intento de reproducir el crimen, personalizando algunos detalles.

Short fue asesinada, la cortaron por la mitad y lavaron su cuerpo antes de abandonarlo. Sufia fue asesinada in situ, y parece que el vano intento de cortarla en dos falló. Short tenía unos cortes de ocho centímetros en las comisuras de la boca, como la sonrisa pintada de un payaso demente. Sufia no los tenía, pero le habían sacado los ojos. Seppo me había hablado de sus espléndidos ojos, y también a un amigo. Parece poco probable que sea una coincidencia.

A Short y a Sufia las dejaron en la misma posición tras el asesinato: con los brazos levantados cuarenta y cinco grados y las piernas abiertas. A ambas les habían extraído un fragmento de piel del pecho derecho. Se dice que a Short le habían escrito las letras ?BK? en el torso con unos cortes, y que le habían introducido hierba en la vagina. Sufia tenía la inscripción ?zorra negra? en el vientre y una botella rota introducida en la vagina.

Lo más sorprendente, tal como se?aló Jaakko, es que tanto Elizabeth Short como Sufia presentaran deformaciones genitales. Para que Heikki hubiera llegado a saber de la mutilación genital de Sufia, tendría que haberle visto la vagina él mismo o alguien tendría que habérselo dicho. La segunda opción es mil veces más probable.