El chico nuevo, Aris, le había mirado de forma extra?a en el cuarto de ba?o, como si quisiera hablar con él por telepatía, pero tuviera miedo de hacerlo. Thomas le ignoró y enseguida fue hasta el lavabo para tragar toda el agua que pudo con su estómago ahora lleno. Cuando terminó y se secó la boca con la mano, Aris se había marchado. El chico estaba sentado junto a la pared, mirando al suelo. A Thomas le daba lástima. Si los clarianos lo habían pasado mal, Aris aún peor. Sobre todo si estaba tan unido a la chica que habían matado como Thomas lo estaba a Teresa.
Minho fue el primero en romper el silencio:
—Creo que todos nos hemos vuelto unos psicópatas como aquellos… ?cómo se llamaban? Raros. Los raros de las ventanas. Estamos sentados aquí esperando una charla del Hombre Rata como si fuera una cosa de lo más normal. Como si estuviéramos en algún tipo de escuela. Una cosa está clara: si tuviera algo bueno que decir, no necesitaría una pu?etera pared mágica para protegerse de nosotros, ?no?
—Corta el rollo y escucha —dijo Newt—, A lo mejor se acaba todo.
—Sí, claro —espetó Minho—. Y Fritanga va a tener bebés, a Winston se le va a quitar ese horror de acné y Thomas por fin sonreirá.
Thomas se volvió hacia Minho y exageró una sonrisa falsa.
—Aquí tienes, ?estás contento?
—?Tío —respondió—, qué feo que eres!
—Si tú lo dices…
—Callad esas bocazas —susurró Newt—. Creo que ha llegado el momento.
Cuando Thomas miró al desconocido —el Hombre Rata, como Minho había tenido la amabilidad de llamarle—, vio que había bajado los pies al suelo y dejado el libro sobre el escritorio. Retiró la silla hacia atrás para ver mejor uno de los cajones, lo abrió y rebuscó entre cosas que Thomas no alcanzaba a distinguir. Finalmente, sacó una carpeta de Manila, muy llena, repleta de papeles desordenados, muchos de ellos doblados y sobresaliendo por los bordes.
—Ah, aquí está —dijo el Hombre Rata con su voz nasal; luego dejó la carpeta sobre el escritorio, la abrió y miró a los chicos que tenía delante—. Gracias por reuniros de forma tan disciplinada para que pueda contaros lo que me han… ordenado que os diga. Por favor, escuchad con atención.
—?Por qué necesitas la pared? —gritó Minho.
Newt alargó la mano por detrás de Thomas y pegó a Minho en el brazo.
—?Cállate!
El Hombre Rata continuó como si no hubiera oído el arrebato:
—Estáis todos aún aquí por una asombrosa voluntad para sobrevivir a pesar de las circunstancias, entre… otras razones. Se enviaron unas sesenta personas a vivir al Claro. Bueno, a vuestro Claro, quiero decir. Hubo otras sesenta personas del Grupo B, pero de momento nos olvidaremos de ellas.
Los ojos del hombre miraron a Aris y después examinaron poco a poco al resto. Thomas no sabía si alguien más se había percatado, pero sin duda hubo cierta familiaridad en aquella mirada rápida. ?Qué significaba…?
—De toda aquella gente, tan sólo sobrevivió una fracción que está aquí ahora. Supongo que eso ya lo sabréis, pero muchas de las cosas que os suceden son únicamente para juzgar y analizar vuestras reacciones. Y, aun así, no es un experimento del todo…, sino más bien un programa. Potenciamos las zonas letales y recogemos los patrones resultantes. Los juntamos todos para conseguir un gran avance en la historia de la ciencia y la medicina.
?Esas situaciones que se os imponen se llaman Variables y cada una de ellas ha sido elaborada minuciosamente. Pronto os explicaré más. Y aunque no puedo contároslo todo esta vez, es vital que sepáis que estas pruebas por las que estáis pasando son por una causa muy importante. Continuad respondiendo bien a las Variables, continuad sobreviviendo, y seréis recompensados con el conocimiento de haber participado en la salvación de la raza humana. Y de vosotros mismos, claro.
El Hombre Rata hizo una pausa, por lo visto para causar más impresión. Thomas miró a Minho y enarcó las cejas.
—Este tío está fucado de la cabeza —susurró Minho—. ?Cómo va a salvar a la raza humana que hayamos escapado de un pu?etero laberinto?
—Represento a un grupo llamado CRUEL —continuó el Hombre Rata—. Sé que suena amenazador, pero son las siglas de Catástrofe Radical: Unidad de Experimentos Letales. No hay nada amenazador en esta empresa, a pesar de lo que podáis pensar. Existimos por un motivo y tan sólo por un motivo: salvar al mundo de la catástrofe. Los que estáis en esta sala sois una parte esencial de lo que planeamos hacer. Tenemos recursos que ningún grupo de ningún tipo en la historia ha conocido jamás. Disponemos de dinero casi ilimitado, de capital humano ilimitado y de una tecnología tan avanzada que está más allá de lo que el hombre más inteligente pudiera querer y desear.
Las pruebas (The Maze Runner #2)
James Dashner's books
- The Eye of Minds
- The Kill Order (The Maze Runner 0.5)
- Virus Letal
- The Maze Runner Files (Maze Runner Trilogy)
- Rising Fears
- The Hunt for Dark Infinity (The 13th Reality #2)
- The Blade of Shattered Hope (The 13th Reality #3)
- The Void of Mist and Thunder (The 13th Reality #4)
- The Rule of Thoughts (The Mortality Doctrine #2)
- The Journal of Curious Letters (The 13th Reality, #1)
- El Corredor Del Laberinto (The Maze Runner #1)
- A Mutiny in Time (Infinity Ring #1)