Antes bruja que muerta

Ceri se irguió un poco más y adoptó un aire oficioso.

 

—Propongo que Al te quite la marca y anule los vínculos de servidumbre que os unen a cambio de tu promesa solemne de no ense?arle a nadie a albergar en su interior la fuerza de las líneas. Además, tú y tus parientes más cercanos, ya sean carnales o por las leyes del hombre, permaneceréis libres de represalias por parte del demonio conocido con el nombre de Algaliarept y sus agentes en este mundo o en siempre jamás, desde ahora hasta que los dos mundos colisionen.

 

Intenté encontrar saliva suficiente para tragar pero no pude. Yo jamás habría pensado en eso.

 

—No —dijo Al con firmeza—. Eso son tres cosas a cambio de la única que yo recibo y no pienso perder por completo el dominio que tengo sobre los suyos. Quiero una forma de recuperar lo que he perdido. Y si ella cruza las líneas, me da igual el acuerdo que tengamos, es mía.

 

—?Podemos obligarlo? —dije en voz baja—. Quiero decir, ?lo tenemos cogido por los huevos?

 

Al lanzó una risita.

 

—Podría llamar a Newt para que arbitrara en esto si queréis…

 

Ceri se puso pálida.

 

—No. —Respiró hondo para tranquilizarse y me miró, su confianza se había resquebrajado pero no se había roto del todo—. ?Cuál de las tres cosas puedes seguir soportando?

 

Pensé en mi madre y en mi hermano Robbie. En Nick.

 

—Quiero que anule los vínculos de servidumbre —dije—, y quiero que me deje en paz a mí y a mis parientes carnales o por ley. Me quedaré con la marca demoníaca y ya lo arreglaré más tarde.

 

Algaliarept levantó un pie y apoyó el tobillo sobre una rodilla doblada.

 

—Qué brujita más lista —asintió—. Si falta a su palabra, renuncia a su alma.

 

Los ojos de Ceri adoptaron una expresión muy seria.

 

—Rachel, si le ense?as a alguien, a quien sea, a contener la energía de las líneas tu alma pertenecerá a Algaliarept. Podrá arrastrarse a siempre jamás cuando quiera y serás suya. ?Lo entiendes?

 

Asentí y por primera vez empecé a creer que vería de nuevo el amanecer.

 

—?Qué pasa si falta él a su palabra?

 

—Si te hace da?o a ti o a alguno de tus parientes y lo hace a propósito, Newl meterá a Algaliarept en una botella y tendrás un genio. Es una cláusula estándar pero me alegro de que lo hayas preguntado.

 

Abrí mucho los ojos. Miré a Al y después a ella.

 

—No jodas, ?en serio?

 

Me sonrió y el pelo le flotó un instante cuando se lo metió detrás de la oreja.

 

—No jodo, en serio.

 

Al carraspeó y volvimos a mirarlo sobresaltadas.

 

—?Y qué hay de ti? —dijo el demonio, obviamente molesto—. ?Qué quieres tú por mantener la boca cerrada?

 

La satisfacción de obtener algo de su antiguo captor y torturador se reflejó en los ojos de Ceri.

 

—Me quitarás del alma la mancha que acepté en tu nombre y no buscarás venganza contra mí ni contra mis parientes carnales o por ley desde ahora hasta que colisionen ambos mundos.

 

—No pienso soportar otra vez mil a?os de desequilibrio provocado por una maldición —dijo Al, indignado—. Para eso eras tú mi maldito familiar. —Posó los dos pies en el suelo y se inclinó hacia delante—. Pero que no se diga que no soy flexible. Tú te quedas con la mancha pero te dejaré que le ense?es a una persona a almacenar la energía de las líneas. —Una sonrisa astuta y satisfecha llenó aquellos ojos impíos—. A un ni?o. Una ni?a, de hecho. A tu hija. Y si ella se lo cuenta a alguien, su alma me la quedo yo. De inmediato.

 

Ceri se puso pálida pero yo no entendí por qué.

 

—Y ella podrá ense?ar a una de sus hijas y así sucesivamente —contraatacó Ceri. Al sonrió.

 

—Hecho. —Se levantó. El fulgor de la energía de siempre jamás flotó sobre él como una sombra. Entrelazó los dedos e hizo crujir los nudillos—. Ah, esto es estupendo. Está muy bien.

 

Miré a Ceri, maravillada.

 

—Pensé que estaría disgustado —dije en voz baja.

 

Ceri negó con la cabeza, era obvio que estaba preocupada.

 

—Sigue teniendo cierto dominio sobre ti. Y cuenta con que una de mis parientes olvide lo serio que es este acuerdo y cometa un error.

 

—Los vínculos de servidumbre —insistí mirando la ventana oscura—. ?Los va a anular ya?

 

—El momento de la disolución no se estableció en ningún momento —dijo Al. Estaba tocando las cosas que había llevado a mi cocina y haciéndolas desaparecer entre un borrón de siempre jamás.

 

Ceri se irguió un poco más.

 

—Estaba implícito. Anula el vínculo, Algaliarept.

 

El demonio la miró por encima de las gafas y sonrió, después se llevó una mano al estómago y otra a la espalda e hizo una burlona reverencia.

 

—Es solo un peque?o detalle, Ceridwen Merriam Dulcíate. Pero no puedes culparme por intentarlo.

 

Se ajustó la levita con un tarareo. Un cuenco repleto de frascos e Instrumentos de plata apareció en la encimera de la isleta. Encima de todo había un libro peque?o con un título manuscrito en letra elegante y entrelazada.